Cuantas veces no encontramos en situaciones que no tienen salida. Entonces vienen las dudas y no sabemos que hacer. Frente a un problema la mejor manera de solucionarlo es orar a nuestro santo Dios. Apártate pues y ábrele la necesidad al Señor. La propiciación no es solo un concepto, es la realidad de que Dios siempre está ahí cuando lo necesitas y abre una puerta de salida.